La autenticidad de la historia del pueblo madeirense se refleja, pues, en los movimientos y la música que recrean momentos de la vida cotidiana de su gente, como las tradiciones pastoriles, la agricultura y el amor, entre otras manifestaciones. En el archipiélago de Madeira, las parroquias y sus respectivas Casas do Povo (casas del pueblo) presentan con orgullo sus grupos folclóricos, compuestos en su mayoría por niños madeirenses. La mayoría de estos grupos actúan ante el público en actos culturales o festivales tradicionales, donde atraen la atención de lugareños y turistas. Cabe destacar que en la región también se celebran galas folclóricas internacionales, en las que el folclore de Madeira está presente junto a grupos de otros países.
El folclore es una manifestación genuina de la tradición cultural de Madeira que sobrevive hoy en día gracias a los grupos folclóricos de la región. La manifestación más significativa del folclore madeirense es el «Bailinho» que, además de la danza, se acompaña de voces e instrumentos musicales tradicionales de la región.
