La historia de Madeira es rica en momentos de gran simbolismo. La cruz de Santa Cruz representa precisamente uno de esos acontecimientos icónicos que han permanecido en la memoria histórica de este archipiélago atlántico.
Volvamos, pues, al siglo XV, cuando se descubrió Madeira. En aquella época, el navegante João Gonçalves Zarco encontró viejos cedros en medio de la densa arboleda que cubría toda esta región costera. Con ellos, mandó hacer una cruz. Esta localidad de la costa este de la isla de Madeira recibió, a raíz de este suceso, el nombre de «Santa Cruz».
Situada en una céntrica plaza de esta ciudad, la cruz de Santa Cruz tiene una relación directa con este momento bautismal. Por lo tanto, está estrechamente vinculada a la toponimia del municipio, que simboliza la cruz de madera que el descubridor erigió cuando desembarcó en la bahía de esta zona.
La cruz de Santa Cruz está compuesta por una columna de mármol blanco apoyada en una base con tres escalones. Además, tiene un capitel que sostiene un crucifijo que data del siglo XIX. También es importante señalar que, con todo su significado simbólico, esta cruz está representada en el escudo de armas del municipio.
Detalles
La cruz de Santa Cruz está compuesta por una columna de mármol blanco, un capitel y un crucifijo, en homenaje a la cruz de madera que João Gonçalves Zarco levantó aquí cuando desembarcó.
