Teleférico de Funchal

Hoy en día, el teleférico de Funchal es una atracción turística ineludible en la isla. Este medio de transporte une el centro de Funchal con la parroquia de Monte y ofrece la memorable experiencia de sobrevolar la ciudad y las montañas.

Durante el siglo XX, el trayecto entre Funchal y Monte se hacía en tren de vapor. Gracias al teleférico de Funchal, ahora es posible realizar este trayecto en unos 15 minutos, sobre un desnivel de 560 metros. Con un total de 39 cabinas, tiene capacidad para transportar a 800 personas por hora.

Partiendo del casco antiguo de Funchal, el cable de acero se extiende a lo largo de una distancia de 3200 metros. El teleférico comienza ofreciendo una vista aérea sobre la red urbana de la capital de Madeira. Poco a poco, el paisaje pasa a estar dominado por los tonos verdes característicos de esta perla atlántica.

Además de ser un verdadero punto de observación en movimiento, el teleférico de Funchal le permite llegar cómodamente a una de las zonas más apreciadas de Funchal. Una vez en Monte, los visitantes pueden aprovechar para explorar sus jardines tropicales, su patrimonio arquitectónico o experimentar los icónicos carrinhos de cesto.